Durante las primeras horas de este miércoles 11 de septiembre, en el Senado, se aprobó oficialmente en lo general y particular la reforma al Poder Judicial del presidente Andrés Manuel López Obrador. El oficialismo consiguió los 86 votos que necesitaba y dejaron a la oposición con 41.
Este martes 10 de septiembre fue un día histórico para México. Durante la tarde, comenzó la discusión en el pleno del Senado sobre la reforma judicial, donde Morena aún necesitaba un voto para poder tener la mayoría calificada y aprobar el dictamen. Aunque la oposición había garantizado el voto en contra de los 43 senadores, el panista Miguel Ángel Yunes Márquez estaba en duda en cuanto a la dirección de su voto. Márquez se reportó con enfermedad y su padre, quien también es su suplente, tomó su lugar en el Senado.
Mientras la discusión se llevaba a cabo, un grupo de manifestantes en contra de la reforma irrumpieron en las instalaciones. Tras ello, el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, dio un receso indefinido a la sesión. Con consignas como «el Poder Judicial no va a caer, no va a caer», los manifestantes lograron que senadores del oficialismo salieron del lugar. No obstante, aquellos de oposición permanecieron dentro y mostraron su apoyo a los trabajadores del Poder Judicial.
Marko Cortés, presidente del Partido Acción Nacional (PAN), escribió en su cuenta de ‘X’: «lo que está pasando en el Senado es síntoma claro que la sociedad no se siente escuchada ni tomada en cuenta. Hacemos un llamado responsable al régimen morenista a que deje de polarizar, atiendan a los trabajadores del Poder Judicial y trabajemos juntos una reforma integral que sí resulta los problemas del sistema de justicia en México».
La sesión fue trasladada a la sede alterna del Senado en la Casona Xicoténcatl. Algunos senadores manifestaron que la policía no les permitía el acceso. El senador de Movimiento Ciudadano, Donaldo Colosio, incluso denunció que le fue arrojada gasolina en la cara y ojos. Además, a esta nueva sede sí se presentó Miguel Ángel Yunes Márquez, quien confirmó en su participación que su voto sería a favor de la reforma.
Sin embargo, la polémica continuó. Y es que desde la primera sesión, se desconocía la ubicación del senador de MC, Daniel Barreda. El excandidato a la presidencia, Jorge Álvarez Maynez, detalló que el padre de Barreda, había sido detenido a las 4 de la mañana y estaba siendo retenido en Campeche por parte del gobierno estatal. Ante esto, el morenista, Adán Augusto, dijo que él ya había hablado con Barreda y que contrario a lo dicho, se encontraba bien y en Ciudad de México.
Horas después, esto sería desmentido por Movimiento Ciudadano, pues pudieron confirmar que Barreda sí se encontraba en Campeche junto con su padre y otro diputado local de MC. Comentaron que fueron detenidos sin mayor explicación y que se les retiraron sus teléfonos. La oposición intentó detener la sesión, pues consideraban que no podía continuar la discusión si hacía falta un senador. No obstante, durante la noche, el senador campechano desmintió que haya sido detenido, pues solamente estaba acompañando a su papá.
Es así como, a pesar de todas las situaciones presentadas, el oficialismo logró aprobar la reforma judicial con 86 votos y solo 41 de la oposición. La iniciativa aún debe ser revisada por los 32 congresos estatales, donde al menos 17 de ellos deberán aprobarla para poder ser publicada de manera oficial.