El Gobierno de México culminó con las labores de repatriación de los 56 cuerpos de personas migrantes procedentes de diferentes países de Latinoamérica, que perdieron la vida en el accidente registrado el pasado 9 de diciembre en Tapachula, Chiapas, donde un tráiler que transportaba de forma clandestina a aproximadamente 160 migrantes chocó contra un puente peatonal.
De acuerdo con un comunicado emitido por el Instituto Nacional de Migración (INM), con base en los acuerdos establecidos junto con el Grupo de Acción Inmediata (GAI) contra la red de migrantes en dicho accidente, el INM de la Secretaría de Gobernación trasladó el pasado 27 de enero los últimos restos, los cuales corresponden a un adulto y un menor de edad originarios de Guatemala.
El traslado de 33 de los cuerpos a Guatemala y 5 a la República Dominicana, se llevó a cabo en un avión caza C295 de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) con el apoyo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), además se dio a conocer en dicho comunicado que, de 104 personas migrantes que presentaron lesiones, al día de hoy ya solo se encuentran hospitalizados una mujer y un hombre, ambos personas adultas de origen Guatemalteco y un niño de la misma nacionalidad, continúa recibiendo atención médica en un albergue del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Chiapas.